Lo primero que haremos es poner agua con sal y una hoja de laurel a calentar.
Mientras se calienta el agua, ponemos el queso (200 gr.) a derretir en una sartén amplia con un poco de aceite de oliva.
Cocemos la pasta y la escurrimos, como siempre, el tiempo de cocción dependerá del fabricante, así que mirad el paquete.
Echamos las cintas sobre el queso y removemos.
Añadimos a continuación la nata (200 ml), removemos y dejamos que de un hervor. No hace falta echar sal, ya que el queso aporta la necesaria.
Añadimos a continuación la nata (200 ml), removemos y dejamos que de un hervor. No hace falta echar sal, ya que el queso aporta la necesaria.
Con estas cantidades os salen 2 o 3 raciones.
Como véis es fácil y rico, podéis sustituir el queso gorgonzola por cabrales o roquefort, o mezclarlos.
que decirte yo las hago parecidos pero en vez de nueces pongo maiz, tiene una pinta estupenda
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