La salsa que vamos a preparar para el salmón de hoy, aparte de tener múltiples usos, gusta mucho a todos los que la prueban, así que es uno de los básicos en cuanto a salsas de mi cocina, probadla que seguro que acertáis.
La podéis usar tanto para unos pimientos de piquillo rellenos, unas pechugas de pollo, para un salmón o un bacalao.
Vamos a usar un bote de unos 290 gr. (peso neto) de pimientos de piquillo en tiras, podéis usar los que vienen enteros, pero van a ser mas caros y como los vamos a triturar no merece la pena gastar mas dinero.
Preparamos una cucharada de harina, dos cucharillas de azúcar moreno (blanco si no tenéis) y una cucharilla de pimentón dulce.
Necesitamos un diente de ajo, media cebolla grande o una mediana, todo esto lo picamos fino y lo pochamos en aceite de oliva (5cucharadas).
Echamos la harina, el de azúcar y el pimentón dulce, lo rehogamos todo y echamos dos vasos de agua caliente.
Removemos y dejamos que reduzca y espese.
Removemos y dejamos que reduzca y espese.
He pedido a la pescadora un trozo de lomo de salmón de unos 600 gr. limpio de piel y de espinas, ya que así evitamos que nadie se ahogue al comerlo, que me ha hecho filetes.
Untamos una bandeja con un poco de aceite de oliva y colocamos el salmón salándolo previamente y doblándolo por la mitad.
Calentamos el horno a 200º y metemos el salmón 10 minutos, lo sacamos, echamos la salsa y metemos otros 5 minutos.
El primer golpe de horno que damos al salmón, se lo podríamos dar también en una sartén, pero en el horno evitamos que luego nos huela la cocina a salmón.
Pues hija; tiene una pinta ese salmon, estupenda; y ademas esa salsa de pimientos,creo que deliciosa con esa base que la has preparado.
ResponderEliminarBesitos