Hoy voy con la segunda versión de como hacer patatas bravas, como prometí cuando hice las primeras patatas bravas. Mas adelante haré una tercera versión.
Lo primero que haremos es pelar, lavar y tronchar unas patatas en trozos no muy grandes, para freírlas a fuego medio y que queden crujientes por fuera y blanditas por dentro.
Ahora hacemos la salsa, para lo que picaremos una cebolla mediana lo mas fina que podamos y la pondremos a pochar con unas guindillas y aceite de oliva.
Yo las guindillas las he dejado enteras para quitarlas después, pero si queréis que pique mas, en vez de echarlas enteras picarlas finas y las dejáis en la salsa.
Una vez que está pochada la cebolla y hemos quitado las guindillas, añadimos una cucharilla de azúcar y otra de pimentón picante, lo rehogamos y echamos medio vaso de vino de Serrada. Dejamos que reduzca el vino.
Echamos las patatas y las rehogamos en esta salsa.
Añadimos un bote de tomate triturado de 400 gr., echamos sal y dejamos que se cocine el tomate removiendo con cuidado de no romper las patatas.
Añadimos un bote de tomate triturado de 400 gr., echamos sal y dejamos que se cocine el tomate removiendo con cuidado de no romper las patatas.
Ya lo tenemos listo.
Espero que os guste.
Qué ricas!! aunque nunca he probado las bravas con salsa de tomate.
ResponderEliminarMe encanta ver las distintas versiones y espero que sigas poniendo, que lo de las bravas es un mundo y en cada sitio se preparan de una forma distinta.
La otra versión de valladolid me pareció un tanto extraña. Soy zamorana viviendo en Madrid, y siempre he visto que la forma más tipica de salsa brava por la meseta es como preparando una bechamel pero con caldo en vez de leche y poniendo pimentón picante (en zamora somos tan chulos que nos la hemos apropiado y la llamamos "salsa zamorana"). Como digo, cada salsa brava es un mundo y cada bar de tapeo otro.
Que ricas tus patatas, otra versión más, yo las hago tambiém pero de manera diferente, ya las verás un día de estos...
ResponderEliminarBss